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La construcción de Córdoba recalcula cómo viene 2023

La construcción de Córdoba recalcula cómo viene 2023

En la 9ª Jornada de Infraestructura quedó expuesta la encrucijada que afecta a quienes trabajan en el sector netamente privado y la obra pública. La agenda de la Provincia y el municipio cordobés, un alivio a la espera de mejores perspectivas.


La 9ª Jornada de Infraestructura organizada por la delegación cordobesa de la Cámara Argentina de la Construcción, dejó tela para cortar, tanto por los anuncios allí producidos –entre ellos el más novedoso, la medición de la huella ambiental en futuras licitaciones–, como también por la creciente preponderancia que adquirió la obra pública en un contexto de caída de la actividad en el sector privado.

Este último aspecto fue motivo de comentarios entre el empresariado e inclusive el sector gremial. Néstor Chavarría, secretario General del gremio de la construcción, UOCRA, señaló que más de las dos terceras partes de la masa laboral en el rubro se desempeña en obras públicas.

De ese total, hay una significativa incidencia de la infraestructura provincial, comentó el dirigente, seguida de la obra de carácter municipal. En cambio, la obra pública de origen nacional verifica recortes presupuestarios y ralentización.

El análisis de Chavarría es consistente con lo que trasciende a nivel del desarrollismo privado, una actividad donde se están terminando proyectos pero prácticamente no existen nuevos lanzamientos.

Los motivos están a la vista: con el actual nivel de tasas de interés, es difícil que el inversor se entusiasme con poner dinero en pozo. El blanqueo para la construcción, que se extiende hasta agosto de 2023, por otro lado, es mirado con desconfianza por las consecuencias ulteriores que medidas similares tuvieron en el pasado reciente.

Otro punto interesante de la Jornada fue el hecho de que Gustavo Weiss, presidente de la Cámara nacional de la Construcción, destacara la continuidad de políticas de Estado como el Camino de las Altas Cumbres y la preservación de los caminos rurales, un caso que es estudiado a nivel nacional para aplicarlo en otras jurisdicciones.

“Argentina tiene dicotomías muy interesantes: récord histórico de consumo de cemento, con un empleo un 10% por debajo del pico máximo. Sin embargo, si les preguntamos a cada una de las empresas constructoras, tenemos enormes y gigantescas dificultades”, remarcó.

Esto se produce a nivel del desarrollismo por la falta de insumos producto del cuello de botella en la oferta y el cierre en las importaciones, pero también “por las dificultades que tenemos para vender el producto final porque los compradores escasean”, dijo Weiss.

“Inevitablemente, la obra pública en una inmensa mayoría van a ir a ralentización o paralización en el tiempo. No hay ninguna posibilidad de hacerla con esta inflación”,  resaltó. Hay en marcha una gestión para armar una mesa con las Provincias en ese sentido.

Mientras tanto, en Córdoba, la mira está puesta en cómo sigue el ambicioso programa que llevó a que en 8 años se realizara infraestructura por 7.110 millones de dólares, según detalló el ministro de Obras Públicas, Ricardo Sosa. Por sobre lo ya inaugurado, el funcionario trazó una agenda: Vialidad invierte este año 144 millones de dólares en 87 obras, de las cuales casi la mitad están en ejecución, 10 adjudicadas, 23 a licitar y 7 en proyecto.

Caminos de las Sierras tiene 27 obras en ejecución, la más importante, la autovía Punilla en la ruta 38. Hay 85 millones de dólares para construir 100 escuelas, de las cuales faltan licitar 22. Hay también 4 hospitales en ejecución.

En Córdoba, en tanto, 954 cuadras cuya pavimentación llegará a fin de 2023. Se construyen 44 nuevos aliviadores cloacales junto con la Provincia y se avanzará con la nueva sede del Concejo Deliberante, el Teatro Comedia y la Plaza España, dijo el intendente Martín Llaryora. Todo ayuda en un contexto complejo.

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