Los 85 años de Sancor: un presente difícil y un futuro muy desafiante
En su reestructuración, la cooperativa láctea debió asumir “modificaciones profundas, con un significativo impacto en cada uno de los grupos de interés”, menciona en una declaración.
En un nuevo aniversario de su constitución, la cooperativa láctea Sancor dio cuenta de su actual proceso de transformación y de los “momentos más difíciles” que debió atravesar el grupo en los últimos años.
“Hace 85 años comenzó su camino una de las empresas que generó cambios trascendentes en muchos de los ámbitos en los cuales le tocó transitar”, precisa la cooperativa en un informe de prensa con motivo de su aniversario.
En el repaso de su historia, menciona sus inicios: 16 cooperativas del oeste santafesino y el este cordobés fueron sus fundadoras; más de 300 cooperativas se sumaron muy rápidamente, extendiendo así su presencia en la producción primaria de leche -además de Santa Fe y Córdoba- a las provincias de Buenos Aires, Santiago del Estero y Entre Ríos.
“SanCor creció y se desarrolló sobre la base de los principios cooperativos arraigados en su gente. Así, fue capaz de llegar a mercados internacionales con su producto original, la manteca, y luego, con una variedad creciente de alimentos lácteos de altísima calidad, a todas las mesas argentinas”, destaca.
Luego de enumerar diferentes etapas como parte relevante en la industria, alude que “hace pocos años, la Cooperativa se enfrentó a uno de sus momentos más difíciles. Los cambios en el sector y en la economía en general, las dificultades propias y las del entorno generaron un escenario que pusieron en evidencia las necesidades urgentes de enfrentar una imprescindible transformación”.
La declaración agrega que en tal contexto “con decisiones muy relevantes, se llevó adelante un proceso de reestructuración muy profundo, tanto en la estructura productiva, comercial y logística como en la instancia societaria y de gestión”. Luego menciona: Se asumieron modificaciones profundas, con un significativo impacto en cada uno de los grupos de interés de la Cooperativa (asociados, empleados, proveedores, clientes y consumidores). Así, se redujo el nivel de actividad y también la estructura industrial y comercial. Se realizaron acuerdos con proveedores y acreedores, a la vez que se concentró la oferta de productos en una canasta más acotada pero siempre valorada por los consumidores.
“Hoy, ese enorme esfuerzo realizado por productores, empleados y allegados de todo tipo exhibe una realidad menos acuciante, pero siempre desafiante, y se tiene plena conciencia de la necesidad de perseverar en la continua búsqueda de formas sencillas y eficientes de cumplir con la misión de agregar valor a la leche producida por los asociados”, concluye.