Adelanto de regalos de fin de año: tendencia que crece en las empresas
En un contexto tan volátil, cada vez son más las empresas que planifican con mayor antelación sus compras corporativas.
Después de la pandemia, son cada vez más las empresas que deciden adelantar la compra de los regalos de fin de año para sus colaboradores, pensando en hacerle frente al contexto. Este 2023, que es particular también por las elecciones, se advierte un incremento mayor en esta tendencia. “Creció de un 25 a 30 por ciento entre nuestros clientes corporativos”, menciona Emilia Armocida, Gerente de Ventas Corporativas y Experiencias de Fanbag.
Para mitigar el impacto significativo que tuvo la política monetaria en el último tiempo, y ganarle a la inflación, muchas compañías tomaron la decisión de planificar con más tiempo. Según una encuesta realizada por la empresa especializada en el mercado de regalos, la anticipación a la compra se agudizó este año debido al contexto inflacionario, siendo un driver de decisión. En un 73% de los casos, pesó el valor de los productos a la hora de comprar un regalo versus 2021, donde los principales factores eran la creatividad (59%) y la simplicidad logística (45%), sobre todo por el contexto que atravesaba el planeta.
Desde la compañía destacan que además de la incertidumbre, que impulsa la decisión de “stockearse”, existe otro punto crítico al que cada vez las organizaciones le prestan más atención: el bienestar emocional de los colaboradores.
El nuevo paradigma empresarial está centrado en trabajar para construir un futuro sostenible tanto para el planeta como para las personas: la igualdad, la conciliación laboral y la importancia del bienestar físico y mental en el trabajo, son claves. Esta tendencia hace que el foco esté puesto en los colaboradores y que las empresas decidan invertir en este tipo de productos como beneficio diferenciador en el mercado, resalta Mercedes Cerino, Account Manager de Fanbag para su plataforma Happier.
También se da otro fenómeno, que es el reemplazo de la clásica canasta navideña – que incluye el pan dulce, turrones y la botella de sidra– por los regalos de experiencia, con mayor variedad de opciones, como obsequio de fin de año en las organizaciones.