Comercio exterior: Argentina, ¡ya nada sorprende!

Por Ana María Videla, Lic. en Comercio Internacional.

Durante el 2022 las reglas del comercio en nuestro país cambiaron radicalmente: la forma de operar, restricciones burocráticas en un inicio y luego a diario, fueron cerrando el acceso al mercado de cambios, bajando cupos de importación en licencias no automática (LNA) y finalmente en Licencias automáticas (LA) Sí, así es, ya no se aprueban las LA tampoco. El CEF (Capacidad Económica Financiera) cada día está más acotado.

En forma proporcional, con el cierre, se dan las diferentes interpretaciones de la normativa, que hacen los bancos, que sumada a la burocracia desmedida (porque temen severas medidas de castigo y por si acaso) exigen, rechazan y desconfían de todo y de todos.

Pueden gustar o no pero todo se ajusta a una nueva política de bloqueo de importaciones, que no son las adecuadas, ni son solución a nada. Hoy no existe empresa ni grande, ni mediana ni pequeña que escape a este contexto.

Las empresas reclaman, las cámaras tratan de ayudar, pero muy poco o nada logran. Hoy ni materias primas, ni insumos, ni bienes de capital tienen suerte para obtener el tan preciado permiso de importación.

Pero hasta aquí, es lo que veníamos viviendo. La situación se descontrola, cuando la inmoralidad se apodera de las decisiones, y nos sumerge y nos obliga a hacer frente a una situación límite con un sentimiento de impotencia, indignación y muchísima tristeza.

Como verán, la situación no mejoro sino que empeoró 100%.  Importar hoy, obliga a trabajar cerrando los ojos, a cualquier precio.

Como no es suficiente, lo difícil no termina allí, porque hay expresas directivas de asignar canal rojo a todo, verificar en piso y enviar a exhaustiva, con costos enormes, para desalentar la importación. La frutilla de la torta “La susceptibilidad”. Los depósitos fiscales colmados de mercadería y los precios de almacenamiento cotizan en bolsa porque ya no hay espacio.

No hay aprobaciones de licencias en lo que va del mes, con suerte alguna licencia tendrá su tan preciado estado “salida”, pero la probabilidad es muy baja. Hay que tener en cuenta, además, que las SIRA que no se aprueban en los primeros 90 días se darán de baja para evitar se usen en medidas cautelares.

Son muchos los cambios, las trabas, la burocracia, el bloqueo. Quienes están en el Comex deben trabajar en diseñar políticas de empresa que puedan hacer frente a épocas como estas y en un futuro, no las tome, nuevamente, en una situación vulnerable.