Economía: Luces y sombras de una gestión hiperactiva
Por Lic. Nancy Villarruel, Economista.
Desde el inicio de la gestión, este Gobierno se ha mostrado enfocado en su objetivo y proactivo en la consecución. El ajuste fiscal ha sido profundo y un tanto desordenado, con recortes en partidas completas del presupuesto y algunas marchas atrás luego del airado reclamo de alguna parte de la sociedad. Otro objetivo es el saneamiento del balance del Banco Central, para lo cual buscó bajar el pasivo con bancos y organismos e incrementar las reservas.
A lo primero lo logró desactivando swaps y cancelando líneas crediticias; a lo segundo, manteniendo la mayoría de los cepos que limitan el acceso de individuos y empresas al mercado de cambios y acumulando deuda por importaciones. Otro gran objetivo fue el de corregir precios relativos y controlar la inflación.
Después del elevadísimo valor del 25% del mes de diciembre, el guarismo ha venido disminuyendo significativamente; al punto de esperar una cifra de sólo un dígito para el mes de abril, que se publicará en unos días. Esto últimos es, por estos días, el tema de conversación recurrente entre quienes se encargan de las compras en supermercados. Es notable y sensible la baja de precios en los artículos de mayor demanda doméstica.
Si hablamos de la baja en los precios, debe destacarse el importantísimo rol que ha estado jugando la autoridad monetaria en la consecución de ese objetivo. Las medidas tendientes a secar la plaza de pesos, bajando la tasa de interés e incentivando la demanda de títulos del Tesoro han sido una clara y efectiva señal. Esta semana nuevamente sorprendió al mercado bajando la tasa de referencia. Fue la tercera vez en el último mes: de 80% al 70% hace 20 días; de 70% a 60% hace una semana, y de 60% a 50% en estos días. La inflación de abril y mayo será, sin dudas, la cucarda que se colgará el Presidente Milei a instancias de su Ministro Caputo.
Doble beneficio: frena las expectativas y reactiva el crédito. Más una importantísima externalidad: con el regreso del crédito podría comenzar pronto la reactivación de la actividad económica. Eso sí, hay que consolar a los ahorristas que se habían acostumbrado a ganancias nominales elevadas. Esa también será una corrección que deberá darse en pos de devolver normalidad a un país económicamente roto, nominalmente desquiciado y con muy pocos incentivos al ahorro y la producción. Luces y sombras de una gestión que se ha mostrado hiper activa desde el inicio y que aún corre detrás de sus propios objetivos. ¿El próximo? La normalización cambiaria. Stay tunned!