
Economía: Un arranque de año a toda velocidad
Dicho está que éste es un Gobierno ha dado de qué hablar desde su asunción. Enero no ha sido excusa ni se ha tomado vacaciones. Van tres semanas y pasaron muchas cosas.
Como siempre, hay buenas y malas. Vaso medio vacío o medio lleno. Cada quien elige cómo verlo. Yo sólo vengo a ofrecer hechos destacables que tienen consecuencias en lo económico y, en todo caso, contextualizarlos.
Enero empezó con el Tesoro abonando el vencimiento de bonos en dólares. Se honró la deuda en tiempo y forma con un bien escasísimo, reservas. Se esperaba la reinversión de esos pagos y en parte sucedió, pero el mercado quedó “esperando ver algo más”. Porque a pesar de lo hasta acá conseguido en materia de corrección de desequilibrios macroeconómicos, los inversores aún esperan pruebas de que este modelo de gestión no tropezará con piedras políticas ni sucumbirá ante reclamos sociales.
Se conoció el dato de inflación de diciembre: en línea con lo esperado por el mercado, levemente superior a lo esperado por el Gobierno. No hay mayor análisis que hacer, la fiera parece estar domada y ya no asusta a la sociedad. Un tema menos.
Esto último vino acompañado del anuncio de una baja del crawling peg a partir de febrero y de la expectativa de mayores bajas de tasas en pesos por parte de la autoridad monetaria. Los pequeños ahorristas aún tratan de acostumbrarse a tasas en pesos marcadamente inferiores a las percibidas hace un año, aunque se mantienen ahorros en esa moneda ya que el dólar parece estar bastante tranquilo. Aprovechando ese contexto, esta semana el Tesoro Nacional consiguió postergar vencimientos en pesos, lo hizo canjeando deuda a una tasa más baja y despejando liquidez en meses en los que podría haber algún ruido político por las elecciones con lo cual, quitó fondos susceptibles de usarse para demandar dólares presionando el precio.
Al respecto, se ha conocido también que durante enero el BCRA ha intervenido en el mercado para mantener a raya la brecha cambiaria e impedir que el CCL sobrepase cierto límite. Un gobierno que pregona la libertad de mercado interviniendo para contener precios? Raro.
Recojo este último dato para ir a otro anuncio rimbombante de las últimas horas: la baja transitoria de retenciones a exportaciones del agro y permanente a las de economías regionales. Vale la pena detenerse en este anuncio, ya que se trata de un reclamo largamente sostenido por el campo, muchas veces prometido en campaña y que Milei acaba de cumplir. Buena para el campo. Buena y mala para el Gobierno. La mala es que ahora deberá ingeniárselas para compensar la baja de la recaudación que implicará la medida, pero la buena es que podrá acumular reservas por mayores liquidaciones de granos.
Las dos últimas novedades tienen que ver con el primero y con el último de los hechos destacados hasta acá. Por un lado, la calificadora de riesgo Moody’s elevó la calificación crediticia de Argentina apoyándose en el “contundente cambio de la política del Gobierno” que corrige los desequilibrios de la economía y aleja la posibilidad de default. Por el otro, la misión del FMI se encuentra en el país analizando los números para evaluar un nuevo acuerdo que le permita al Gobierno contar con fondos frescos para terminar de levantar las restricciones del mercado cambiario, respaldar su posición de honrar la deuda y, con suerte, provocar el despegue tan ansiado y anunciado. Riesgo país en 600 pero eso lo dejo para la próxima. Stay tunned!