El comercio exterior en clave electoral: reparar ¡urgente! el motor exportador
La CAC elaboró un documento con propuestas de políticas públicas que comprenden, entre otros puntos, al brazo exportador. Las sugerencias fueron enviadas a los principales candidatos presidenciales con el objetivo de impulsar los cambios que el sector necesita para desarrollarse.
La Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) elaboró un documento con propuestas de políticas públicas que fueron enviadas a los principales candidatos presidenciales. Las sugerencias fueron elaboradas por los equipos técnicos de la entidad en conjunto con asociados de todo el país. Las propuestas están agrupadas en tres ejes temáticos: comercio y servicios, transformación laboral y comercio exterior.
Respecto del comercio exterior, el documento advierte que desde hace unos años, y amplificado en estos últimos meses, el sector se encuentra atravesando graves demoras en las aprobaciones de las licencias de importación bajo el nuevo Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA).
Esto no solo afecta a bienes de uso, sino que, además, a insumos y bienes de capital tan importantes para el desarrollo del sector productivo. Adicionalmente, las normativas cambiarias siguen siendo otro obstáculo sustancial debido a que no responden a los criterios de los mercados internacionales y, por consiguiente, sitúan a las Pymes en una situación vulnerable y con poca solución.
Frente a esto, la CAC propone modificar los mecanismos de aprobación para priorizar insumos y bienes de capital para la industria nacional con fines exportadores o de consumo local. Asimismo, continuar con las diversas aperturas en las posiciones arancelarias con el fin de evitar las “posiciones bolsas” que usualmente involucran mercaderías no fabricadas en nuestro país junto con otras que sí lo hacen.
También se propone brindar los lineamientos exactos para la evaluación del Coeficiente de la Capacidad Económica Financiera y que no sean verdaderos obstáculos para los importadores, puesto que de ello dependen para tramitar licencias de importación.
Otras medidas: continuar con la puesta en marcha definitiva de la Cuenta Corriente Única de Comercio Exterior (CCUCE); instrumentar condiciones estables que no afecten las aprobaciones de los pagos del Sistema de Importaciones de la República Argentina y Pagos de Servicios al Exterior (SIRASE) como el transporte internacional o patentes que afecten el normal desarrollo comercial.
Sobrecostos operativos. En este plano, se enumera que los operadores se encuentran con constantes demoras aduaneras y sobrecostos operativos que restan competitividad debido a que dicha situación se refleja en el precio final. En tal sentido, es necesario mejorar y corregir aquellos obstáculos que puedan alivianar esta postura. Por tanto, el documento de la CAC sugiere:
-Brindar mayores respuestas y ordenamiento en la asignación de turnos y trámites inherentes para, de esta manera, evitar los servicios extraordinarios.
-Otorgar mayor transparencia en las gestiones de las terminales evitando, de esta manera, los sobreprecios, como así también minimizar los inconvenientes que se desprenden por el repentino cese de actividades en las distintas terminales.
Aranceles al comercio exterior. Tanto Argentina como el Mercosur cuentan con elevadas trabas arancelarias en comparación al resto del mundo. En consecuencia, se encarecen los precios finales de distintas mercaderías. En este sentido, se considera pertinente: 1) Pregonar en los encuentros del Mercosur un nuevo programa de desgravación tributaria para mercaderías extrazona que ayuden a reducir los costos de insumos y bienes de capital para la industria nacional. 2) Agilizar las operaciones de comercio exterior intrazona con el fin de afianzar relaciones comerciales y facilitar los ingresos y egresos de mercaderías del bloque.
Facilitación y promoción de exportaciones. Se advierte sobre la debilidad que representa el bajo nivel de exportaciones que registra la economía argentina, debido a sus efectos adversos sobre la generación de empleo y valor agregado, y sus repercusiones sobre la solvencia externa.
En consecuencia, la entidad empresaria promueve las siguientes medidas:
-Ampliar el plazo para el ingreso y liquidación de divisas con el fin de generar mayor competitividad comercial.
-Continuar con la progresiva reducción de derechos de exportación, con especial énfasis en las actividades más intensivas en empleo, hasta su completa eliminación.
-Promocionar los esquemas de reintegros a las exportaciones y procurar que no se produzcan excesivas demoras en los cobros.
-Seguir con las mejoras en los regímenes simplificados como el de Exporta Simple 2.0. Ampliar el alcance del programa aumentando más actores del comercio exterior en búsqueda de facilitar y abaratar el proceso de exportación.
