Herramientas financieras para un momento muy difícil
Por Lic. Nancy Villarruel, Economista.
“Buen día. Vengo acá porque ya no puedo dormir, tengo estrés, palpitaciones, no sé qué debería hacer”. Es la típica conversación de un argentino promedio con su asesor de inversiones en estos días.
Es una situación que en mis años de experiencia profesional -que no son pocos- no recuerdo haber vivido. Confluencia de alta inflación, elevada brecha cambiaria, crítico nivel de reservas, déficit fiscal y emisión desmedida. Se suma la elección presidencial con impredecible desenlace. El conjunto dibuja una coyuntura que a los argentinos nos ha llenado de incertidumbre y desasosiego.
Soy economista y creo tener suficientes crisis vividas que valen tanto como diplomas en la pared como para recomendar CALMA. Hemos pasado una hiper como la del ’89, la crisis del 2001 (con default incluido), y lo que ha sucedido cíclicamente en los últimos 20 años. Aquí seguimos.
En esta coyuntura eso es lo que no hay que hacer: dormirse. Proteger los ingresos, el sueldo, los ahorros, la futura jubilación. Para todo hay un camino que desandar. Para el asalariado: ponga su sueldo en la billetera digital, electrónica o virtual. Cualquiera que dé un rendimiento mientras no gaste sus pesos. A medida que lleguen los vencimientos o realice compras, use esos fondos por el importe exacto de su gasto y el resto que siga generando intereses en la cuenta. O coloque su sueldo en un FCI de money market. Cuando necesite pagar, entre a la app, haga un rescate y transfiera o pague. Pero mientras tanto va ganando intereses.
Al ahorrista: si se quiere proteger de la suba de precios, hay FCI que intentan copiar la evolución de la inflación. Deje que los expertos resuelvan donde y en qué invertir para tratar de seguir al índice de precios, mientras diversifican su portafolio con un costo mínimo.
Si lo que pretende es protegerse de la eventual devaluación, hay títulos de deuda privados (obligaciones negociables) de empresas de primera línea, o títulos públicos en moneda extranjera o siguiendo la cotización del dólar oficial (dólar linked), que además pagan intereses en dólares. Incluso bonos del gobierno que pagan lo que tenga la suba más alta: inflación o devaluación (bonos duales).
Hoy, el mercado de capitales tiene un abanico de opciones para dormir más tranquilos y esperar las elecciones con calma, pensando más en la juntada del domingo 22 que en las placas de algún canal a las 22 horas. Stay tunned!
