Economía: Todos vimos venir este baile
Columna por Lic. Nancy Villarruel, Economista.
Recientemente, escuchando una charla se planteó la siguiente disyuntiva: Si invitás una cena de negocios y al pagar te dicen: son $19.500 o U$S 20, teniendo los dólares en el bolsillo, ¿con qué pagarías? Creo adivinar la respuesta y sirve para explicar la coyuntura actual. Elegimos gastar los pesos y guardarnos los dólares. Eso quiere decir que si una persona ahorra en una moneda es porque el sistema monetario y cambiario del país en el que vive está roto.
En los últimos días ha quedado en evidencia el grado de repudio que los argentinos le tenemos a nuestra moneda. Influido, según interpretan algunos, por declaraciones irresponsables de un candidato, el comportamiento de los argentinos ha sido el de huir del peso y refugiarse aquello que “huela” a dólar.
Sabido es que no tenemos libre acceso a moneda extranjera, así que hemos resuelto refugiarnos en dólares financieros (MEP, Blue, CCL), activos dolarizados (ON Hard Dollar, FCI, Bonos) o activos vinculados a la evolución del dólar (ON Dólar Linked, FCI, Bonos).
Esta situación sacó a relucir comportamientos de otras épocas de parte de todos los actores del mercado. Operativos en cuevas, demanda masiva de activos atados al dólar, disparada del blue, titulares altisonantes. Todo es parte de nuestro folclore y conocemos los pasos de este baile. Nadie puede decir que este final no fue anticipado. Lo vimos venir y cronicamos su acercamiento.
Hoy, Milei y Massa son señalados como los responsables de esta corrida, pero lo cierto es que ha sido una sucesión de desaciertos registrados en los últimos meses los que nos han traído hasta acá. Una brecha que va desde el 150% al 187% según si se toma el dólar MEP, CCL o blue no es sostenible y sólo muestra un overshoting producto de la incertidumbre y el miedo. La primera surge de la pregunta: ¿quién ganará las elecciones?, la segunda viene de ¿qué hará si gana?
Los analistas coinciden en que cuesta encontrar una antesala de elecciones presidenciales con tantas incógnitas como en la actual. Y eso se ve reflejado en el nivel de ansiedad, incertidumbre, búsqueda de cobertura y –sobre todo- de disparada del dólar.
Flaco favor están haciendo las declaraciones de figuras preponderantes de la política, y menos aún el durísimo dato de inflación que se dio a conocer esta semana. Precios más altos, más platita en el bolsillo, más pobres, menos dólares. Parece difícil de explicar. Pero todo cierra. Stay tunned!